martes, 28 de mayo de 2013

páginas de historia




Esperanzas en filamentos astrales. Con los pies clavados en el centro de la tierra, con los ojos en el horizonte lejano, con el alma en los brazos… Cruzo los mares y estrellas. Poder de la planta milenaria que vive al compás de los arbustos del monte, de tus entrañas salvajes que florecen al paso naranja, al ritmo de las burbujas de tu pecho sonriente entre los vapores de tierras húmedas, calostro de sol que alimenta el ser de nata cortada, suspiros de nieves. Patria de encuentros, patria de amores, patria de hijos, patria de cocos, patria de luz que acompaña y protege en bandadas de vuelos ancestrales, dibujan cielos de colores primarios, recios, verdaderos héroes de tierras sagradas que luchan por su libertad, por su merecida sustancia de alimentos y poderes. Quietud palpable en la orilla de sus márgenes, de su Caribe de estruendo, de su lago relámpago de sueños, páginas de historia cauta.